Desde hace unos años, y cada vez más, son utilizados animales en terapias dirigidas a personas mayores o con discapacidades. Se trata de un apoyo terapéutico y, por lo tanto, hay que asesorarse bien mediante profesionales que nos recomienden qué tipo de animal o raza en concreto nos interesa para la terapia que queramos llevar a cabo. En el caso del que estamos hablando, se requerirán animales tranquilos y que les guste estar acompañados. Si el animal es nervioso o necesita de mucho ejercicio, lo que se transmitirá al paciente será nerviosismo. Los beneficios de este tipo de terapias son muchos, de ahí que cada día se recurra más a ella. En concreto, en personas de avanzada edad favorece una mejora de la salud mental y física ya que un animal en casa es el estímulo que necesitan muchas personas para salir a pasear, hacer ejercicio de alguna manera, y además, reducir así su ansiedad. Por otro lado, hace que la atención se centre en algo constructivo como es el ciudado del animal, alimentarlo, cepillarlo, etc. Por otro lado, proporcionan compañía, solucionando un problema tan grave y generalizado hoy en día como es la soledad y los perjuicios mentales y físicos que ello conlleva. Los animales nos dan cariño, majorando la calidad de vida y el estado de ánimo de las personas que se sienten solas o están enfermas. Existen muchas razones saludables para tener animales. Además de lo mencionado anteriormente, se sabe que acariciar a un animal o sacarlo a pasear, reduce la tensión de las personas con hipertensión y previene la aparición de enfermedades cardíacas. Hacen que las personas mayores se sientan más útiles, con responsabilidades y que manejen mejor las situaciones estresantes ante la vida, siendo un hecho que precisan menos atención médica. Las mascotas ayudan a mejorar la calidad y cantidad de las relaciones interpersonales, muy importantes para mantener el equilibrio emocional y el bienestar psicológico. También, en las residencias de la tercera edad son cada vez más utilizadas este tipo de terapias, ya que aumenta el contacto social y verbal entre los residentes. Por todo esto y mucho más, ponga un animal en su vida.
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